"Estás realmente bien? Estoy pretendiendo que estoy bien. Por favor, no interrumpas mi actuación"
-1 semana después-
Hablaba con Justin, todos los días, todas las
noches. Se lo notaba cansado y algo deprimido, pero siempre estaba feliz cuando
hablaba de sus Beliebers y de cómo se lucían en sus conciertos. Estaba
verdaderamente triste.
No me había levantado de la cama demasiado,
sólo para comer e ir al estudio de vez en cuando. Estaba más por la computadora
y mi celular, mirando si Justin había escrito algo.
Beadles habían viajado durante esta semana a
Los Ángeles para visitar a sus tíos y no me quería quedar con Ryan ni Chaz, a
solas, porque jugarían la X-box y me quedaría deprimida, igualmente. Cait me
prometió que cuando regresara, nos pondríamos al corriente rápidamente, así
que, supongo que tendré que esperar.
Alguien tocó la puerta. Seguro era mamá,
aunque en el fondo de mi alma rogaba que sea Justin quien toque la puerta.
Descarté esa idea de mi cabeza: “es imposible”-, pensé.
Me levanté con pereza de la cama, y, abrí la
puerta. Allí, se encontraba mi mamá, con la cara de súplica rogando para que
salga de la cama y me disponga a salir, aunque sea sola.
-
¡Vamos!-,
me zarandeó-, será divertido.
-
¿Ah, sí?
Sí claro, sola-. Respondí pesadamente. Bufó.
-
¡Skylar
Fletcher, juro que si no sales ahora mismo te saco la laptop y el celular una
semana!-, exclamó.
-
Pensándolo
bien, voy a salir mami-. Dije haciendo mi mejor cara de cachorro.
Aunque mi orgullo hubiese dicho-, en otras circunstancias-, “sácamelos”, sabía que no podría
sobrevivir una semana sin laptop ni celular. Y, esconderlos, sólo aumentará el
castigo.
Me puse una sudadera de bob sponja, unos jeans ajustados y unas vans
blancas. Estaba bien. Dejé mi cabello como estaba, y, salí.
El viento golpeaba mi cara, hacía
bastante frío. Claro, estábamos en diciembre. Justin había dicho que no sabría si vendría
pero lo intentaría, aunque sé que se quedará allí, sólo que teme decírmelo.
¡BASTA!, deja de pensar en Justin. Estúpida.
Me senté en un
banco. Escondí mi cabeza en mi capucha, y, fue cuando me di cuenta de
que había paparazzis escondidos un poco más lejos de donde yo estaba. Cerré mis
ojos.
Miré mi Twitter y fue cuando empezaron las
preguntas de…: ¿Tu y Justin terminaron?, ¡no
me digan que terminaron :’(! Y cosas así. Aunque no faltaban los
comentarios como: “Espero que hayan
terminado”, “Que suerte que
terminaron. No me caes bien” Y cosas así.
Twiteé: Dreamers,
no se preocupen. Justin y yo NO terminamos. Es sólo un falso rumor, él está de
gira consintiendo a sus hermosas Beliebers. XOXO.
Guardé mi celular en mi bolsillo, y, luego vi
que los paparazzis ya no estaban más. Uff.
Escondí mi cabeza nuevamente, tenía frío.
-
¿Skylar?-,
preguntó una voz que me sonaba.
Me giré, y, ahí, vi a
una persona que no veía hace tiempo…
-
¿Mike?-,
pregunté sonriente.
Me levanté y le dediqué un abrazo. Necesitaba a alguien a quien abrazar
además de mi almohada. Me alzó del suelo.
-
¡Hey!-,
exclamó contento, y, depositó un beso en la comisura de mis labios, cosa que me
pareció extraña, pero decidí ignorar.
-
Hola-.
Saludé.
-
Oí que tu
novio se fue de gira-. Comentó sentándose conmigo en el banco-, ¿estás bien?-,
preguntó preocupado. Asentí.
-
Sí-.
Respondí-, supongo que te apareciste en el momento más oportuno.
-
¡Hey, no
me llamaste!-, dijo codeándome divertido.
-
¡Cierto!-,
recordé-, disculpa, es que lo había olvidado.
-
Me habías
olvidado-. Corrigió retóricamente.
Simplemente sonreí. Bueno, de una manera u otra, lo había olvidado, ¡qué
mala amiga!
-
¿Y?-,
pregunté-, ¿qué me cuentas, Mike?
-
Nada-. Se
encogió de hombros-. Últimamente nada.
-
¿Qué no
tienes amigos?-, pregunté. Sonrió.
-
Claro,
tonta-. Respondió obvio. Sonreí-, es sólo que… Nada, están muy raros.
-
¿Enamorados,
tal vez?
-
Puede-. Se
encogió de hombros-, la mayoría son unos mujeriegos.
-
¿Incluyéndote?-,
pregunté burlonamente.
-
Estoy
disponible-. Dije guiñándome un ojo. Me tomé como broma, y reí-, ¿quieres ir a
hacer algo?-, preguntó.
-
¿Cómo qué?
-
Ir al cine
o andar en bicicleta o…
-
¿Tú andas
en moto?-, pregunté interrumpiéndole retóricamente. Miré una moto que estaba
cerca, era el único que había así que supuse que era de él.
-
Sí-.
Respondió-, mi auto se robo-, explicó-,
así que ahorré lo suficiente como para una moto.
-
¿Me
enseñas?-, pregunté sonriente y mirándole con mi mejor cara de cachorro.
-
Claro-.
Respondió.
Me levanté del banco, emocionada, y, llegué a la moto rápidamente. Se
rió por mi emoción, y, me subí al asiento de la moto.
-
Bien, éste
es el embrague-. Dijo mostrándome el embrague-, y, esté, el motor-. Dijo-.
Enciende el motor.
Apreté el botón que
encendía el motor, y, rugió ferozmente. Eso, de alguna manera, me dio más
adrenalina.
-
Bueno,
éste es el acelerador,- señaló-, y, éste el freno.
Asentía lentamente.
-
Bueno,
ahora, aprieta el embrague y no lo sueltes.
-
Bueno, no
soltar el embrague-, me repetí.
Apreté el embrague y no lo solté. Sonrió.
-
Bueno,
ahora, aprietas el acelerador y…- Iba apretarlo, pero él negó con la cabeza
rápidamente-, espera-. Dijo, tocando mi mano.
-
Bueno-,
respondí.
Al darse cuenta que
tocaba mi mano, lo soltó, y, se sonrojó. ¿Qué?
-
Bueno,
aprietas el acelerador-. Repitió, asentí-, bueno, tienes que tener en cuenta
que, si quieres parar, tienes que apretar el freno con fuerza, ya que no anda
demasiado, pero, tienes que bajar la velocidad antes-. Avisó-, aparte, luego de
apretar el acelerador, ya puedes soltar el embrague, se irá solo-. Dijo, en
cambio, mi mano seguía en el embrague, cansado-, entonces, nada, eso. Si
quieres apagar el motor, apagas de la misma forma en que prendiste.
Había entendido bien. No quería causar ningún problema, así que atiné a
escuchar bien las instrucciones de Mike.
Apreté el acelerador, y, solté
lentamente el embrague tal como dijo.
Empecé a ir rápido, y, sin darme
cuenta, iba a 60 km. Por hora.
Empecé a gritar, se
podría decir que sangraba adrenalina. Subí el kilometraje, ahora, iba a 85 km
por hora.
Estaba en unas calles, conocidas, aún, pero
algo lejos del parque. Seguramente retomaría después.
Aumenté un poco de velocidad, llegando a lo
más veloz del kilometraje. Sonreía a más no poder, era la primera vez en toda
la semana que sonreía de verdad. Además de cuando hablaba con Justin.
Miré hacia atrás, no se me daba mirar por el
retrovisor, sentía que alguien había detrás de mí. No, error, no había nadie.
Miré hacia adelante, y, había una montaña de
rocas.
Traté de parar la moto, pero, fue en vano, ya
que tenía que bajar la velocidad, y, yo prácticamente ya besaba las rocas…
mierda.
Wow que loco.......me encantó, sigue a sí............pregunta :¿tienes herman@s? Si tienes ¿cuantos ?
ResponderEliminarAaaaahh!! Tienes que seguirla! La amo la amo la amo la amo muuuuuuucho. Siguela porfavor. Escribes exelente. Creo que la rashis va a morir? Ay Dios. Mike me va a matar chica! Matar! La pobre moto.. Y yo que queria una<3 Bye espero que la sigas. Xoxo
ResponderEliminarnota mental:no usar motos ok ola wapisima me encanta estoy encantada con esta novela cada vez te mejoras esta escena me ha recordado a la saga de crepusculo jajaja en serio que me encanta al final me comprare una moto una moto morada con un casco azul y gritare bob esponja oc no jajaja que buff no se que me encanta que espero que sigas pronto wapetona pero si no puedes tu tranquila tomate tu tiempo bueno que nose que decir mas wapetona que nos vemos besitos ;D
ResponderEliminarXOXO:NALU.
Me encanta! SIGUUEEEELAA :)) pleaas! :))))))) Aiaiaiai que Skaylar besa las rocas y como que no sonmuy sabrosas que digamos... xD
ResponderEliminarBuuenoo pues esoo espero que la sigas lo más rápido que puedas. Chauuuu! <3 :)
me encanta siguela me podrian ayudar con un like https://www.facebook.com/photo.php?fbid=336821899769593&set=o.111367450125&type=1&comment_id=748758¬if_t=photo_comment
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